Los pescados semigrasos

Son aquellos cuya cantidad de grasa oscila entre el 2% (de los pescados blancos) y el 5% (de los pescados azules) aunque generalmente la cantidad de grasa que tiene varía según la época del año en que estén por lo que en algunas ocasiones algunos de ellos pueden ser considerados pescado blanco.

Son pescados muy gustosos con abundante gelatina.

Entre los pescados semigrasos se encuentran: el besugo, el salmonete, el cabracho, la lubina, el bacalao, la dorada, el mero y la trucha.

Recuerda siempre que cuando se compran frescos hay que mantenerlos en la nevera hasta el momento de su preparación, que no debe exceder de los dos días.

Si los compras congelados, debes guardarlos en el congelador hasta horas antes de su consumo, en que puedes subirlos a la parte de nevera.