Paredes: cuestiones previas

Ya tienes un nuevo lugar para vivir (sea la casa de compra o de alquiler) y en el mejor de los casos sus paredes necesitaran un toque personal, en el peor un verdadero arreglo.

Ten en cuenta que los buenos profesionales son muy caros, y que los “medio profesionales” no son garantía de nada y por ello te pueden hacer una chapuza, y recuerda, las chapuzas las sabe hacer cualquier, por ejemplo tú

Cuestiones previas

Antes de decidir que vas a hacer con las paredes has de tener en cuenta una cuestión fundamental: el estado de las mismas.

Cuando las paredes están muy, pero que muy deterioradas (con grietas más o menos profundas, multitud de agujeros, mal niveladas, etc.) y no quieres o no puedes llamar a un profesional para que las ponga en condiciones, lo mejor es renunciar a pintarlas y recurrir al papel o cualquier otra técnica que sirva para tapar todas esas anomalías.

Algunas viviendas viejas tienen pinturas que “despegan” de la pared cuando ponemos las nuevas, convirtiendo algo tan fácil como es pintar en un autentico tormento. Este es otro de los supuestos en que te aconsejo que abandones la pintura como elemento decorativo para optar por cualquier otro, preferentemente papel.

Otro problema más de las paredes viejas: algunas tienen tendencia a producir manchas en la nueva pintura transcurrido un tiempo. Parece ser que están manchas están producidas por un tipo de hongos, por lo que sólo las pinturas que se disuelven con aguarrás pueden obtener algún éxito.

Aunque el aspecto de las paredes no presente grietas ni agujeros, no está de mas que pruebes de pintar en una parte (aproximadamente un metro cuadrado) para comprobar cuando menos que la pintura existente no “despega”.

Empecinarse en pintarlas cuando están muy deterioradas nos puede abocar a una absurda perdida de tiempo y dinero, así como a una sensación de impotencia o frustración, pues tras multitud de retoque y capas de pintura, al final comprobamos que la única solución para disimular los defectos es taparlos.

Si el papel como elemento decorativo esta de moda ¡estupendo!, pero aún cuando no esté de moda, recurramos a ellos sin prejuicios ante la más mínima sospecha o evidencia de dificultades con la pintura.

Pueden ser papeles blancos que imitan el estucado (los hay especiales para pintar luego encima de ellos y no son caros) y que dejaremos como están o pintaremos luego como queramos, blanco o con el color que nos guste o esté de moda. O puede ser otro tipo de papel, ya decorado, liso o con dibujos que podemos dejar como viene de fabrica. Emplearemos mucho menos tiempo y el aspecto final no tienen porque defraudarnos.

Después viene el tema de las modas, que en el caso de la decoración más que modas son tendencias y en todas las épocas ha habido quien voluntariamente huye de ellas.

Además del papel hay otras muchas posibilidades para ocultar o disimular los defectos de las paredes, unas más caras y otras más baratas, unas más laboriosas y otras menos.

He aquí algunos ejemplo:

• Si los defectos se encuentran solamente en una parte, que es además la baja, podemos recurrir a cubrirlos mediante zócalos de aproximadamente un metro de alto. Los zócalos como elemento decorativo se han utilizado siempre. Estos zócalos pueden ser de machihembrado de pino, paneles de madera, corcho, moqueta, estera, rafia, charol, algún material plástico o papel de los de empapelar El resto de pared que se supone que esta más o menos bien la pintaremos.

• Si las grietas o defectos están solo en una de las paredes, quizás tengamos la suerte de poder colocar en ella estanterías o armarios. y tapar así los defectos.

• Podemos combinar pintura y otras técnicas. Pintar las paredes que están en buen estado y en las que vemos que están deterioradas utilizaremos cualquiera de las otras técnicas como: panelados (de madera, de plástico, etc.) tapizados (con telas, rafia, etc.), y, preferentemente, empapelados.

• Si las paredes que están en mal estado son las del baño o la cocina, aun cuando nada impide que optemos por cualquiera de las técnicas mencionadas, lógicamente algunas de ellas se prestan más a este tipo de dependencias, como por ejemplo el machihembrado de pino (al que aplicaremos una vez puesto una capa de barniz de yate pero que evitaremos poner en la zona de la bañera), paneles de plástico o goma, etc. La no tan lejana costumbre de que baño y cocina tenían que estar decorados con cerámica o mármol, esta cediendo paso a la utilización por parte de los interioristas de otros materiales, entre los que ocupa un papel destacado la pintura y en algunos casos el papel (aunque lógicamente solo en las partes que no toca el agua)

• Una opción atrevida, válida cuando la vivienda es muy, muy vieja, y las paredes están muy deterioradas, es decantarse por la “rusticidad”. Tapar solo los agujeros, y pintar con yeso teñido las paredes. La elección del color debe ser muy cuidadosa pues una elección equivocada puede echar a perder el efecto. Con los amarillos ocres, el azul Mediterráneo, el salmón de tono subido, etc podemos hacer alguna prueba. En este caso, al pintar no intentaremos igualar el tono en la pared, pues parte del encanto de este sistema es que el color quede más intenso en unas partes que en otras.

• Etc.

Consejo práctico: Cuando hayas decidido que arreglos vas a hacer recurre a los amigos para que te ayuden. Pintar o empapelar paredes será más ameno y sobre todo mas fácil con una ayuda (uno en la escalera y otro abajo).